Shopify es una de las plataformas de comercio electrónico más de moda de la web en estos momentos. Incluso se podría decir que es para el comercio electrónico lo que WordPress es para el blogging. Pero simplemente contratar un paquete de Shopify y montar un pequeño sitio web puede no ser suficiente para hacer que empiece a entrar el dinero. Como toda empresa minorista, hace falta mucho trabajo para preparar tu tienda para el desafío.
Encontrarás mucha información útil en la documentación de Shopify. Explica cómo configurar los métodos de pago, cobrar impuestos, listar y eliminar productos, generar informes, y mucho más. La mayoría es bastante sencilla de hacer gracias a la intuitiva interfaz de usuario de Shopify.
Sea como sea, hay dos prerrequisitos importantes a los que prestar atención antes de abrir tu tienda Shopify. El primero es personalizar el aspecto de tu tienda; el segundo es hacer pruebas exhaustivas.
Personalizar tu tienda
Shopify ofrece varias plantillas gratuitas que puedes usar como base de tu sitio web. Eso es bueno. Lo que no es bueno es usar una de esas plantillas tal cual. ¿Por qué? Porque son genéricas y sosas. Además, muchos propietarios de sitios web las usan sin ninguna modificación. Eso significa que tu tienda puede acabar teniendo el mismo aspecto idéntico que otra tienda que usa la misma plantilla, haciendo que te sea más difícil distinguir a tu empresa de la competencia.
Sin duda deberías personalizar tu plantilla usando diferentes colores, fuentes y gráficos. La documentación de Shopify ofrece un montón de información útil que explica cómo efectuar modificaciones. Si no tienes tiempo o conocimientos para modificar la plantilla elegida tú mismo, hay empresas de diseño web que pueden hacerlo por ti. Contratar ayuda cuesta dinero, pero merecerá la pena cuando veas el producto terminado.
Pruebas exhaustivas
Los desarrolladores web profesionales prueban los sitios web de comercio electrónico antes de ponerlos a disposición del público; tú también deberías hacerlo. Si hay una cosa que los desarrolladores web experimentados pueden decirte, es que ofrecer a los clientes una mala experiencia de usuario es una de las maneras más rápidas de alejarlos de tu sitio web permanentemente. Tú no quieres hacer eso, así que pon a prueba tu sitio web de Shopify exhaustivamente antes de que empiece a funcionar.
Deberías probar:
- La funcionalidad del menú
- El procesamiento de los pagos
- La realización de pedidos
- La funcionalidad del carro de la compra
- Los métodos de contacto (si procede)
En resumen, deberías probar tu sitio web como si fueras un cliente que está intentando hacer un pedido. Sin embargo, no te límites a hacer un pedido y te olvides de ello. Haz múltiples pedidos, eso te forzará a navegar por tu tienda y probar todas las características que ofreces. El objetivo es detectar los fallos que tus clientes podrían encontrar antes de que los encuentren.
Shopify es una plataforma de comercio electrónico excelente que cada día que pasa es usada por más minoristas online. Hiciste bien en elegir usarla. Ahora, haz lo que sea necesario para hacer que tu sitio web sea lo mejor posible antes de que entre en funcionamiento.